El trabajo infantil no es un tema del que resulte fácil hablar. Por ese motivo, en 2021, durante el Año Internacional para la Eliminación del Trabajo Infantil, ayudamos a la OIT a centrar su comunicación en los aspectos positivos.
Qué hicimos:
Desde un inicio, la identidad visual era alegre, creativa e inquisitiva: como los niños. Pensemos en cometas y pelotas, no en palas y tierra. Creamos una identidad visual y una estrategia narrativa centrada en el mundo que queremos ver, un mundo sin trabajo infantil, en vez de en la realidad actual.
También exhibimos algunas iniciativas mundiales para erradicar el trabajo infantil. Partes interesadas de todo el mundo presentaron sus compromisos de acción y pudimos amplificar sus esfuerzos en internet a través de personas influyentes en redes sociales y a través de las noticias en medios tradicionales.
Al final del año, miles de personas habían accedido a nuestros contenidos escritos y en vídeo, que podían encontrar en sus buzones de entradas gracias a los boletines, en redes sociales y en el sitio web que creamos desde cero. Miles más participaron en el reto que lanzamos en redes sociales a partir de la pregunta: ¿Qué querías ser cuando eras niño/a?
Las respuestas, que iban desde ser médico a ser profesor, nos recuerdan por qué hacemos este trabajo en primer lugar.
Es hora de acabar con el trabajo infantil.
Es el momento de acelerar el ritmo de los avances.